TETRAMYTHOS
vinos elaborados CON UN TOQUE DE filosofía estoica
Aunque nuestra visita a Tetramythos se agendó de forma precipitada, nos acogieron con los brazos abiertos y nos compartieron con ganas todo el trabajo que realizan. Ese día conocimos por primera vez a Panagiotis Papagiannopoulos, viticultor, enólogo y co-fundador de la bodega junto con los hermanos Spanos.
El objetivo de la bodega está claro: expresar uno de los terrenos vitivinícolas más emblemáticos de Grecia a través de sus vinos. Los tres tuvieron claro desde el principio que el cultivo ecológico (certificado desde 1996) era el primer requisito para conseguirlo. Como dato curioso, en la actualidad Egialia es la zona de Grecia con mayor porcentaje de agricultura ecológica.
Panagiotis, proveniente de esta zona y de una familia de varias generaciones de viticultores, decidió empezar por investigar con más profundidad el terreno y la trayectoria vitivinícola de la zona. La importancia de estas investigaciones va de la mano con el valor que da a los métodos tradicionales de vinificación, y por este motivo utiliza en la actualidad algunas de las técnicas que utilizaban en la Grecia antigua.
“Grecia está llena de historias vivas, tradición, y está en nuestras manos que esto tenga una continuidad en el futuro. En cada rincón de este país, existen métodos tradicionales, variedades autóctonas y vinos amigables, vinos apreciados ya la vez elaborados con respeto por la historia de los antepasados”
Hace aproximadamente trece años y después de tener un dominio más amplio sobre el terreno y una mayor experiencia en la bodega, Panagiotis se dio cuenta de que una aproximación más natural en el proceso de vinificación ayudaría aún más a conseguir su objetivo inicial de plasmar el terro único de Egialia, y desde entonces todos los vinos fermentan de manera espontánea y se completan sin ninguna adición de componentes biotecnológicos. También siguen algún método biodinámico, en especial el calendario lunar para los días de siembra y cosecha.
«las pequeñas desviaciones que tienen lugar en las vinificaciones naturales hacen que un vino escape de las normas comunes y conduzca nuestras papilas gustativas hacia caminos desconocidos»
En todos sus vinos descubrimos un carácter compartido reflejo del terroir en el que nacen. El resultado de la unión entre estos métodos y esta tierra son vinos con un perfil marcado de equilibrio, elegancia y una vibrante acidez natural.
HACER VINO ES COMO LA FILOSOFÍA ESTOICA. ES MUY COMPLICADO Y SE NECESITA MUCHA PACIENCIA
Egialia ha sido una zona apreciada para hacer vinos desde la antigüedad, y hay constancia de que se ha hecho vino de forma ininterrumpida como mínimo desde el 1000 adC. Pausanias dijo el año 2 a. que el norte del Peloponeso era la región ideal para hacer vino.
A nivel geográfico se explica por qué esta ubicación es privilegiada. Las viñas están ubicadas en la falda del Monte Helmos, en su mayoría de los 850m para arriba. Orientados hacia el golfo de Corinto, estos viñedos están constantemente aireados por las brisas salinas y frescas que suben del golf y ayudan a crear un microclima equilibrado, sin condiciones extremas en invierno o verano.
El entorno de los viñedos son bosques, ríos y barrancos frondosos, y el suelo es rico en minerales. Destaca un bloque calcáreo a pocos metros de profundidad que da una mineralidad marcada especialmente en los vinos blancos. Las maduraciones en este contexto son lentas y dan tiempo a la uva a desarrollar una mayor complejidad aromática. Añade Panagiotis también que el río Krathis que pasa por esa zona es el río con el agua más pura de toda Grecia. Según la mitología, es donde fue bautizado Aquiles para volverle inmortal (excepto el talón).
En la bodega trabajan con 11 variedades. La más abundante es roditis de Patras, y las más destacables son sideritis y mavro kalavrythino, dos variedades extremadamente locales que estaban camino de desaparecer y que han sobrevivido gracias al trabajo de esta bodega.
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Panagiotis es una figura clave en esta bodega. Bajo una apariencia de persona reservada, se esconde una persona culta, centrada y franca. De gestos discretos, pero con gran tacto por la naturaleza, la cultura y especialmente por la tradición y la historia de la Grecia antigua.
Aunque no estuvo presente durante toda la visita, porque su compañera Melitini se había encargado fantásticamente bien esta parte, a la hora de expresar nuestro interés por llevar sus vinos a España, demostró una sensibilidad notable para saber quien comercializa sus vinos, como si de alguna forma protectora se quisiera asegurar que caen en buenas manos.
Nosotros personalmente nos quedaríamos con la siguiente reflexión de Panagiotis sobre el futuro del vino:
«La clave para la alta gastronomía es algo que incluya tradición, continuidad y una expresión moderna con respeto a los grandes terrenos históricos de Grecia»
